LA HABANA, Cuba -. El activista cubano Adrián Curuneaux Stivens, vicepresidente del Movimiento Opositores por una Nueva República, fue condenado a siete años de prisión por los sucesos ocurridos en mayo de 2021, fecha en la que intentó visitar en el Hospital Clínico-Quirúrgico “Calixto García” al artista y preso político Luis Manuel Otero Alcántara (LMOA).
El activista fue detenido y acusado por el delito de atentado, por la agresión a un policía, hace aproximadamente cuatro años.
En marzo de 2021, Curuneaux Stivens fue condenado a un año de privación de libertad subsidiado por limitación de libertad por el mismo periodo de tiempo, y mientras cumplía esa sanción en régimen de libertad provisional, fue detenido dos meses después cuando intentó visitar a LMOA.
En esa ocasión estuvo detenido en Valle Grande sin ser enjuiciado por un año y seis meses, desde mayo de 2021 hasta noviembre de 2022, que salió en libertad; y el pasado 16 de julio se le realizó el juicio correspondiente a esa causa.
De acuerdo con la sentencia emitida por el Tribunal Municipal Popular de lo Penal de Centro Habana, se acordó sancionar a Curuneaux Stivens como “autor de dos delitos consumados de atentado a tres y cuatro años de privación de libertad respectivamente, y como autor directo de un delito de desacato (…) a tres años (…), y como única y conjunta la de siete años de privación de libertad”.
El documento señala que el 4 de mayo de 2021, Adrián se dirigió a la referida institución sanitaria para visitar a Otero Alcántara, quien se encontraba retenido allí luego de realizar una huelga de hambre y sed.
En el lugar, los trabajadores “le explicaron que atendiendo al protocolo de salud establecido para el enfrentamiento de la covid-19, estaban prohibidas las visitas”.
El opositor “hizo caso omiso y comenzó a alterarse, instante en que oficiales del Ministerio del Interior que allí se encontraban se le acercaron y le solicitaron sus documentos de identificación (…), de igual manera se le indicó apagar el teléfono móvil que llevaba en la mano, donde grababa lo que estaba sucediendo, y al no hacerlo se le ocupó el mismo”, detalla el escrito.